
Si alguien requiere hablar estos días con Don Gil Loya, máximo jefe de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado tendrá que esperar mínimo al próximo lunes, porque resulta que se fue a la sierra, a Divisadero, para desestresarse de tanto trabajo. Pero no fue solo, se llevó a unos 50 de sus lamebotas, desde jefes de departamento para arriba, directores, subsecretarios y todo aquél que le pueda ayudar en su campaña política, claro, con todos los gastos pagados. Es en el hotel Mansión Tarahumara, donde se encuentran desde jueves pasado y se supone que salen mañana. Por cierto, el precio por habitación en ese hotel es entre 115 y 126 dólares, aparte los alimentos así que imagínese el gastadero. Los invitados recibieron su playera con el logo del escudo de la campaña de Don Gil Loya y claro, que de volada se la tuvieron que poner para que se viera el “power”. El pretexto de esa reunión supuestamente fue el cierre de su curso “pasión por el servicio”.