Juárez una ciudad sedienta de verde
- Por Editora M
Ciudad Juárez.- En las últimas décadas, el crecimiento urbano desmedido, el cambio climático y la falta de políticas sostenibles han dejado a muchas ciudades mexicanas, como Ciudad Juárez, con una cobertura vegetal casi nula.
El concreto avanza, pero los árboles desaparecen. La reforestación ya no es una opción, sino una necesidad urgente para mejorar la calidad de vida, combatir las islas de calor y recuperar el equilibrio ecológico.
El paisaje que se seca
Según un estudio realizado por el Instituto de Arquitectura, Diseño y Arte de la UACJ en 2023, la temperatura promedio en zonas sin cobertura vegetal puede ser hasta 7°C mayor que en aquellas donde hay árboles y áreas verdes.
"En Ciudad Juárez se han talado más árboles de los que se plantan, y los que se plantan, muchas veces no sobreviven más de un año por falta de seguimiento y por la elección incorrecta del tipo de vegetación", señala el doctor en Arquitectura y Urbanismo, Juan Luis Ramírez.
¿Qué tipo de vegetación necesita la ciudad?
Especialistas como la bióloga María Teresa Gómez del Instituto de Ciencias Biomédicas han insistido en la necesidad de promover especies nativas y resistentes al clima desértico, como:
Mezquite
Huizache
Palo Verde
Gobernadora
Maguey y nopal (como parte de paisajismo xerófilo)
Árbol del desierto (Chilopsis linearis)
"Traer especies de otras regiones solo garantiza más gasto de agua y una alta mortalidad vegetal.
La clave está en plantar árboles que ya estén adaptados al entorno", afirma Gómez.
*Colectivos que siembran esperanza*
En la colonia Anapra, el colectivo "Verde Urbano Juárez" ha logrado reforestar más de 20 espacios públicos con apoyo de voluntarios y donaciones.
Ana Pineda, una de las fundadoras, comenta:
"Comenzamos con 10 árboles en un parque abandonado. Hoy ya llevamos más de 800 en diferentes puntos de la ciudad”, señala.
“Pero no basta con plantar: hay que educar para cuidar".
También existen iniciativas como “Juárez Limpio” y “Planta un Árbol, Siembra Vida”, que capacitan a jóvenes y familias para que adopten un árbol y aprendan a mantenerlo.
Carlos Méndez, de 65 años y vecino de la colonia Chaveña, recuerda cuando los árboles eran parte del paisaje.
"Antes teníamos sombra, pájaros, y hasta bajaba la temperatura”.
“Ahora todo es polvo y calor. Cada vez que alguien planta un árbol aquí, nos da esperanza."
El reto institucional
A pesar de los esfuerzos ciudadanos, especialistas señalan la necesidad de una estrategia municipal integral de reforestación, que incluya:
Diagnóstico de zonas prioritarias.
Viveros comunitarios de plantas nativas.
Programas escolares de apadrinamiento de árboles.
Monitoreo y seguimiento post-plantación.
Actualmente, el vivero forestal del Ejido Villa Luz en Samalayuca produce anualmente más de 50,000 plantas.
Sin embargo, muchas no logran sobrevivir debido a la falta de sistemas de riego y cuidado urbano.
Los especialistas señalan que reforestar no solo es plantar árboles: es sembrar comunidad, conciencia y futuro.
La ciudad necesita más sombra, más oxígeno y más compromiso.
Afortunadamente, cada vez más ciudadanos, académicos y colectivos están dispuestos a poner manos en la tierra para cambiar el gris por verde.